Cazuelita de champiñones con patatas y huevo

1. Limpiar muy bien los champiñones, quitándoles toda la tierra. Cortar en láminas en el caso de los champiñones enteros. Salpimentar al gusto.

2. Pelar los dientes de ajo.

3. En una sartén, calentar una cucharada sopera de aceite de oliva, cuando esté caliente, dorar los dientes de ajo. Una vez estén dorados, retirar y echar los champiñones. Añadir el perejil al gusto y freir hasta que estén hechos. Reservar los champiñones y la sartén con el aceite donde los hemos frito.

4. Por otro lado, pelar las patatas y cortarlas en dados medianos. Sazonarlas. En otra sartén, calentar abundante aceite y freir las patatas. Cuando las patatas estén a nuestro gusto, escurrirlas bien y distribuirlas en dos cazuelitas de barro individuales, o en una grande; o bien en un recipiente apto para horno. Añadir por encima los champiñones (yo frío ambas cosas a la vez para poder añadirlas más o menos al mismo tiempo). Tapar para conservar el calor.

5. En la sartén en la que freímos los champiñones, freir los taquitos de jamón. Escurrirlos bien y añadirlos a las cazuelitas por encima de los champiñones.

6. En esa misma sartén, con el aceite caliente, echar la cucharadita de harina y dejar que se fría un poco (medio minuto). Añadirle el medio vaso de vino, remover bien para que no queden grumos de la harina y dejar que hierva un poco para que se evapore el alcohol (dos o tres minutos).
Repartir la salsa entre las dos cazuelitas.

7. Precalentar el horno a 180ºC.

8. Colocar un huevo crudo en cada cazuelita, con mucho cuidado para que no se rompan.

9. Meter las cazuelitas en el horno hasta que el huevo esté bien hecho. Lo mejor para que el huevo se cuaje bien es cocerlo con las cazuelitas tapadas.