Espaghetti y albóndigas

1. Hierva los espaguettis en una olla grande con agua salada. Caliente 3 cucharadas de aceite en una sartén para hornear a fuego medio. Añada la cebolla, el ajo y el perejil y cocine hasta que las verduras estén blandas pero aún translúcidas, cerca de 10 minutos. Retire la cacerola del fuego y deje enfriar.

2. En un tazón vierta leche suficiente sobre el pan hasta humedecerlo y deje remojando mientras las cebollas se enfrían. Combine la carne de cerdo con la de res en un tazón grande aparte. Añada el huevo y el queso parmesano y sazone generosamente con sal y pimienta. Utilice sus manos para exprimir el exceso de leche del pan y añádalo al tazón de la carne junto con la mezcla de cebolla. (Conserve la sartén de las cebollas - la necesitará para freír las albóndigas.) Suavemente combine todos los ingredientes con las manos o con una cuchara hasta que estén mezclados entre sí. No mezcle demasiado o las albóndigas quedarán duras. Divida la mezcla de carne en 10 partes iguales y déles forma de albóndigas bien redondeadas.

3. Precaliente el horno a 350 grados F (175°C).

4. Caliente unas 3 cucharadas de aceite en la sartén a fuego medio y dore las albóndigas por todos los lados, unos 10 minutos aproximadamente. Ponga las albóndigas en una charola para hornear y rocíe por encima con una cucharada de la salsa de tomate. Desmorone encima el queso mozzarella y rocíe con aceite de oliva. Coloque las albóndigas y hornée hasta que estén bien cocidas, unos 15 minutos.

5. Mientras tanto, cocine los espaguettis en agua hirviendo hasta que estén al dente, unos 8 minutos aproximadamente. Escurra y pase los espaguettis a un plato grande para servir. Vierta en el resto de la salsa y mezcle bien. Con una cuchara coloque las albóndigas en la parte superior de los espaguetis y adorne con hojas de albahaca. Sirva inmediatamente con el queso parmesano extra.

6. Para la salsa:
Caliente el aceite de oliva en una cacerola grande a fuego medio-bajo. Añada la cebolla y el ajo y cocine hasta que estén blandos, 4 ó 5 minutos. Con cuidado, añada los tomates (nada salpica como los tomates), añada cerca de 1 / 2 taza del líquido reservado y sazone con sal y pimienta. Cocine hasta que la salsa se espese, unos 15 minutos. Pruebe y ajuste la sazón con sal y pimienta. Deje que suelte el hervor, revolviendo durante unos minutos con una cuchara de madera para machacar aún más los tomates. Baje el fuego y deje hervir a fuego lento de 20 a 25 minutos. Revuelva la albahaca fresca y sazone de nuevo.